El diputado del Grupo Parlamentario Nacionalista Canario (CCa), Mario Cabrera González, intervino en el Pleno del Parlamento de Canarias para preguntar por la cuales son las alternativas que se barajan al tramo de autovía entre El Cuchillete-Matas Blancas, dentro del proyecto de conectividad insular conocido como el eje Norte – Sur de Fuerteventura.
Una cuestión “de gran interés para la población majorera, especialmente para los vecinos de los municipios de Tuineje y Pájara afectados por el trazado inicial”, señaló el diputado durante su intervención.
En este sentido, Cabrera agradeció al responsable del área su última visita a la isla de Fuerteventura en la que aseguró que el futuro tramo de autovía entre El Cuchillete y Matas Blancas no pasará por el Valle de La Lajita, para evitar afectaciones a las viviendas o a las principales actividades socioeconómicas de la zona.
Por ello, el parlamentario majorero quiso conocer “si existe alguna alternativa que se esté valorando como la óptima para conectar las zonas de Matas Blancas y El Cuchillete en el camino hacia completar el eje norte – sur”.
Para Mario Cabrera “se trata de una infraestructura fundamental para la conectividad de Fuerteventura, que lleva décadas de retraso”. “Un proyecto de gran envergadura que requiere de un profundo estudio y valoración, pero que sobre todo debe tener por objetivo mejorar la vida de quienes residen en la isla”, argumentó el diputado.
Por este motivo, el diputado pidió que se continúe trabajando en su desarrollo siempre de la mano de los ayuntamientos, el Cabildo insular y la población majorera, así como también teniendo presente la necesidad de proteger el territorio y “que el impacto de la carretera sea el menor posible, especialmente si conlleva afecciones a los vecinos de la zona”, añadió el diputado.
En este sentido, Cabrera agradeció “que se haya incorporado en el estudio las aportaciones hechas por los propios vecinos, para que la nueva vía tenga el menor impacto posible”.
En respuesta, el consejero aseguró que se va a optar por “dos alternativas que, con un impacto menor en la actividad socioeconómica, así como en las viviendas